Si ya te has decidido por una estructura de pérgola de aluminio, ahora ya solo te queda escoger el sistema de cubierta. Con una base de aluminio puedes optar entre diferentes opciones en función de la ubicación, del clima y, por supuesto, de las preferencias personales.
Entre los diferentes tipos de cubierta para una estructura de pérgola de aluminio están:
- Techo de toldos
- Placas de cristal transparente
- Travesaños fijos aluminio
- Pérgolas bioclimáticas
Los toldos, un clásico de las pérgolas
Al pensar en una pérgola seguro que una de las primeras imágenes que te viene a la cabeza es la de una estructura de aluminio o madera con un techo de lonas. Esta opción se ha convertido en un clásico por su versatilidad y funcionalidad.
Gracias a un sistema de toldos móviles puedes extender o recoger la lona y tener así un espacio con la iluminación y temperatura que quieres para cada momento. Otro de los atractivos de este sistema de cubierta es que ofrece muchas posibilidades para personalizarlo y tener una pérgola original.
Hay muchas opciones en tipos de tejidos: impermeables, opacos, lino, acrílicos, microperforados… Y todos ellos en diferentes colores y estampados. En resumen, mucho donde elegir.
Cubiertas de travesaños para estructura de pérgola de aluminio
Si no quieres complicarte la vida y lo que necesitas es una zona de descanso entre sol y sombra, una estructura de pérgola de aluminio con techo de travesaños también de aluminio es perfecta.
Sus líneas sencillas encajan en todos los entornos y aportan un toque de elegancia que no pasa desapercibido.
Techo transparente
En zonas lluviosas y con poca luz una buena opción son las cubiertas con placas de cristal o paneles de policarbonato. Son un techo que protege de las inclemencias del tiempo pero que no resta luz.
Es la combinación perfecta de protección e iluminación. Además pueden ser techos móviles para aprovechar el buen tiempo y tener una mejor ventilación natural.
Estructura de pérgola de aluminio con sistema bioclimático
La pérgola más innovadora que permite controlar la temperatura del habitáculo y con la que se puede disfrutar de este espacio durante todo el año es la pérgola bioclimática.
Esta pérgola está formada por lamas de aluminio móviles que oscilan entre 0 y 135 grados. De esta manera se puede graduar la temperatura controlando la cantidad de aire que pasa. Es un sistema que permite un importante ahorro de energía y que aprovecha los recursos naturales.
En caso de lluvia se cierra por completo dejando un espacio aislado y hermético donde poder seguir disfrutando del aire libre.