Te proponemos 3 maneras diferentes de sacar más partido a tu patio para que puedas disfrutar de él en cualquier época del año. Una solución sencilla gracias a 3 modelos diferentes de pérgolas de metal para patios.
¿Por qué pérgolas de metal?
Puede que te preguntes por qué pérgolas de metal y no de obra o de madera. La respuesta es que el metal te proporciona una estructura sólida y ligera a la vez. Puedes diseñar espacios amplios sin que te molesten unos gruesos pilares de obra. Esto es ideal para patios pequeños en los que hay que maximizar los metros disponibles.
Además, una estructura de metal es muy resistente y va a soportar sin problema el trasiego diario y también las inclemencias del tiempo. Aguanta sin problema la lluvia o el sol y te va a reclamar pocos trabajos de mantenimiento y pocos gastos.
Un modelo para cada gusto
Una de las ventajas de las estructuras de pérgolas en metal es que admiten diferentes tipos de cubierta. De este modo, puedes personalizar tu pérgola para tener un rincón en tu patio que se convierta en tu refugio preferido.
Te proponemos 3 modelos de pérgolas de metal para patios.
- Pérgola con techo de travesaños de metal fijos. Es una solución sencilla para crear una zona de sol y sombra donde tomar una cerveza al final de la tarde y alejarte de los problemas del día. Con este tipo de pérgola la instalas y te olvidas de todo. Su mantenimiento es mínimo y puedes personalizarla de mil maneras, por ejemplo con unas plantas trepadoras que en primavera y verano te ayudarán a tener más sombra, frescor y un aroma maravilloso.
- Pérgola de toldos móviles. Esta pérgola es un clásico entre las pérgolas que queda bien en todos los entornos. Gracias a los toldos con diferentes tejidos, colores e incluso estampados puedes personalizar este espacio para convertirlo en un rincón original y único. Además la ventaja de poder extender o recoger el toldo cuando quieras te permite sacar aún más partido a la pérgola.
Sistema bioclimático. Es una de las opciones más completas del mercado. Su sistema de cubierta con lamas de aluminio orientables permite controlar la entrada de luz y aire para tener siempre la temperatura interior que quieres. Una de las ventajas de instalar en tu patio una pérgola bioclimática es que puedes cerrar por completo la cubierta y tener un espacio perfectamente aislado y protegido. Así, puedes estar en tu patio aunque afuera esté lloviendo o nevando. Una inversión que vas a rentabilizar mucho antes de lo que crees.