Los metros de una vivienda siempre nos resultan pocos. Aunque la casa sea amplia acabamos esparciéndonos y necesitamos más espacio. Una estupenda manera de aumentar la zona habitable es instalar una pérgola de 6 metros en el jardín.
Un espacio multifuncional
La estructura de una pérgola permite crear de manera rápida y sencilla una nueva sala en tu jardín. Si se opta por colocala adosada a la pared tendrás un amplio porche, pero con la ligereza que dan los pilares y entramados de aluminio.
Gracias a la versatilidad y firmeza de este material se pueden diseñar estructuras de grandes dimensiones sin miedo a que se caigan. De esta manera dispondremos de muchos metros cuadrados en los que, por ejemplo, podemos instalar una zona de comedor y un espacio contiguo de descanso.
Al ser una zona unida a la casa puedes transformar el porche en una sala de juegos para los más pequeños o en un despacho para teletrabajar mientras escuchas a la naturaleza.
Y si hay una reunión familiar, una pérgola al aire libre es la mejor opción para habilitar una pista de baile.
Opciones de cobertura para una pérgola de 6 metros
Existen diversas opciones para cubrir una pérgola de 6 metros. La elección dependerá de la situación geográfica, de la orientación y, por supuesto, de nuestros gustos y preferencias.
La situación geográfica es realmente importante porque si estamos en una zona de mucho sol necesitaremos un sistema de cobertura que permita pasar el aire, pero que nos proporcione protección ante los rayos UV. En este caso son ideales las pérgolas con toldos retráctiles diseñadas con toldos microperforados o con protección solar.
Si por el contrario estamos en una zona con lluvia frecuente puede resultar práctico invertir en una pérgola bioclimática. Uno de los sistemas más avanzados que, gracias a sus lamas orientables, se puede controlar en todo momento la temperatura interior e incluso cerrar por completo el techo.
Otra buena opción son los techos con placas de policarbonato. Dan una excelente protección y a la vez dejan pasar la luz, algo que resulta estupendo, por ejemplo en zonas lluviosas o sombrías.