Pérgola cerrada de aluminio, la solución para zonas lluviosas

Aunque estés acostumbrado a la lluvia no deja de ser un incordio cuando quieres disfrutar de un rato de tu terraza o tu jardín. Para hacer frente al mal tiempo la solución es una pérgola cerrada de aluminio. 

Una estructura clásica solo que con un sistema de cobertura a prueba de chaparrones. 

Pérgola cerrada de aluminio bioclimática

Las pérgolas bioclimáticas van ganando adeptos gracias a su funcionalidad y versatilidad. Recordamos que una pérgola bioclimática es la que dispone de una cubierta formada por lamas de aluminio que se pueden mover desde o a 135 grados

Esta movilidad permite adoptar diferentes posiciones para dejar entrar más o menos cantidad de aire y de sol. Y en el caso concreto de lluvia, permiten cerrar por completo el techo consiguiendo una protección total. 

Además, las pérgolas bioclimáticas disponen de un sistema de canalización del agua. La lluvia que cae en el tejado se recoge en una especie de canalones de manera que no interfiere ni molesta en la zona cubierta. 

Si además completas tu pérgola cerrada de aluminio con toldos verticales o cortinas de cristal, la protección es total y no habrá nada que te impida pasar una relajada tarde en tu jardín.  

Otras opciones de protección

Acabamos de mencionar las cortinas de cristal y precisamente este material también es una opción para la cubierta de una pérgola de aluminio, una estructura que gracias al aluminio no se oxida y aguanta los envites del tiempo sin problema. Un techo de placas de cristal (fijo o móvil) ayuda a tener un espacio de protección en el jardín ante la lluvia sin restar visibilidad y luz al habitáculo. 

Si el cristal te parece demasiado delicado, también puedes optar por un techo de placas de policarbonato. Una solución parecida y más resistente.

Por último, cómo no mencionar al clásico entre los clásicos en sistema de cobertura de pérgolas: los toldos. Para climas lluviosos lo único que hay que tener en cuenta es escoger una tela con tratamiento específico impermeable o de tipo acrílica. 

Y si lo completas con un sistema de motorización que incorpore pluviómetro que ante el inicio de la lluvia recoge el toldo, tendrás pérgola para muchos años. 

Ahora ya solo queda escoger el tipo de cubierta para tu pérgola de aluminio.